|
Archivo de versos, VIP Пабло Неруда. Одинокая роза. III. Остров : El mundo habla español
Pablo Neruda. La rosa separada. La isla
Antigua Rapa Nui, llama sin voz, perdónanos a nosotros los parlanchines del inundo: hemos venido de todas partes a escupir en tu lava, llegamos llenos de conflictos, de divergencias, de sangre, de llanto y digestiones, de guerras y duraznos, en pequeñas hileras de inamistad, de sonrisas hipócritas, reunidos por los dados del cielo sobre la mesa de tu silencio.
Una vez más llegamos a mancillarte.
Saludo primero al cráter, a Ranu Raraku, a sus párpados de légamo, a sus viejos labios verdes: es ancho, y altos muros lo circulan, lo encierran, pero el agua allá abajo, mezquina, sucia, negra, vive, se comunica con la muerte como una iguana inmóvil, soñolienta, escondida.
Yo, aprendiz de volcanes, conocí, infante aún, las lenguas de Aconcagua, el vómito encendido del volcán Tronador, en la noche espantosa vi caer la luz del Villarrica fulminando las vacas, torrencial, abrasando plantas y campamentos, crepitar derribando peñascos en la hoguera.
Pero si aquí me hubiera dejado mi infancia, en este volcán muerto hace mil años, en este Ranu Raraku, ombligo de la muerte, habría aullado de terror y habría obedecido: habría deslizado mi vida al silencio, hubiera caído al miedo verde, a la boca del cráter desdentado, transformándome en légamo, en lenguas de la iguana.
Silencio depositado en la cuenca, terror de la boca lunaria, hay un minuto, una hora pesada como si el tiempo detenido se fuera a convertir en piedra inmensa: es un momento, pronto también disuelve el tiempo su nueva estatua imposible y queda el día inmóvil, como un encarcelado dentro del cráter, dentro de la cárcel del cráter, adentro de los ojos de la iguana del cráter.
Пабло Неруда. Одинокая роза. III. Остров
Sólo para miembros VIP!...
Entrada a la zona VIP
Registración
|