De historia y pueblo estamos hechos. Pueblo e historia conducen al futuro.
Nada es más invencible que la vida; su viento infla nuestras velas.
Así triunfarán pueblo, historia y vida cuando nosotros alcancemos la victoria.
Amanece ya en la lejanía de nuestras manos. Y la aurora se despierta en nosotros, porque somos los constructores de su casa, los defensores de sus luces.
Ven con nosotros que la lucha continua. Levanta tu orgullo miliciano, muchacha.