En el extraño bazar
Del amor, junto a la mar,
La perla triste y sin par
Le tocó por suerte a Agar.
Agar de tanto tenerla
Al pecho, de tanto verla
Agar, llegó a aborrecerla;
Majó, tiró al mar la perla.
Y cuando Agar, venenosa
De inútil furia, y llorosa,
Pidió al mar la perla hermosa,
Dijo la mar borrascosa:
"¿Qué hiciste, torpe, qué hiciste
De la perla que tuviste?
La majaste, me la diste;
Yo guardo la perla triste."
Versos sencillos : XLII
Mstislav Pavlov.
Share:
mir-es.com
14 09 2012
En this moment no comments!
Please note that all fields followed by an asterisk * must be filled in.