(Patio de marmol
del palacio viejo)
Los arcos están rejios de reflejos granates,
de ámbar, verdes, del sol en la cristalería;
desbordado, el aljibe, sobre las losas mates,
abre jardines de una auroral pedrería.
Por el ámbito fresco, con ecos metalinos,
gorjea el verdón, libre de su jaula de plata.
El surtidor, enhiesto, raya sus diamantinos
chorros, al sol, en oro, en malva, en escarlata.
... En torno, sueña el campo solo. Las once. Aún suena
la torre; aun el cielo está herido de pitos.
Y, bajo el azul májico, el caserón se llena,
ante la fiesta pobre, de sueños infinitos.
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Laurent Parcelier
mir-es.com
13 05 2016
Comentarios : El mundo habla español
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